En el #DiaMundialdelAgua debemos recordar la importancia de la correcta gestión del ciclo hidrológico, así como de la reducción del consumo de este recurso y la mejora de los tratamientos y procesos de reutilización del mismo.
El agua es un elemento esencial para el desarrollo sostenible, base de la Agenda 2030 y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS); en particular, del número 6: Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para todos.
Para ello, será necesario garantizar el acceso de toda la población mundial al agua potable y a servicios de saneamiento e higiene adecuados, así como la mejora de la calidad y aumento de la eficiencia del uso de este recurso o la protección de los ecosistemas vinculados al mismo.
La consecución de estas metas se encuentra en manos de todos y cada uno de nosotros, trabajemos cada cual según nuestras funciones y responsabilidades para hacer de este objetivo una realidad.