. Este es el escenario más favorable en cuanto a las temperaturas que se prevén a raíz del estudio Escenarios Locales de Cambio Climático de Andalucía, que ha presentado la administración regional. Un escenario al que acompaña un aumento de un 4% de las precipitaciones y que representa un clima más cálido pero con un déficit hídrico menos acusado.
Con los resultados del estudio, en el que se calculan hasta 45 variables (olas de calor, heladas, balance hídrico...), el escenario más pesimista de todos los posibles de aquí al 2099 da como resultado un clima "extremadamente caluroso y seco con un aumento medio de las temperaturas de 6,5 grados y una reducción de precipitaciones de un 17%", unos números que generarían un clima subdesértico.
Estos escenarios dependerán de "cómo evolucione el cambio climático", donde todos los agentes de la sociedad juegan un papel fundamental. Entre las medidas que se deben tomar está "en primer lugar reducir las emisiones de efecto invernadero (administraciones, empresas y ciudadanos)", pasando fundamentalmente por sustituir las energías fósiles por energías renovables y producir menos residuos, así como incrementar los sumideros naturales de carbono. En este contexto, toman vital importancia las políticas energéticas actuales, a través del fomento de las energías renovables, destacando especialmente la energía solar fotovoltaica, en auge en los últimos años. Así mismo, resulta fundamental incluir el concepto de economía circular en todos los sectores de la población.