Durante los años 2010 a 2012 se desarrolló la vigilancia ambiental de la explotación de varios Parques Eólicos y las correspondientes líneas eléctricas de alta tensión de IBERDROLA en la provincia de Huelva.
Estas tareas comprendieron el control y seguimiento ambiental de las instalaciones, encaminada fundamentalmente a comprobar sobre el terreno el potencial impacto sobre la avifauna y los quirópteros, así como el seguimiento del cumplimiento y grado de eficacia de las medidas correctoras de aplicación según el condicionado de la Consejería de Medio Ambiente recogido en las correspondientes Declaraciones de Impacto Ambiental de los proyectos.
Para la realización de estas tareas se diseñó un programa de control específico consistente en el desarrollo de inspecciones periódicas en las instalaciones, en las que se realizaban, entre otras tareas, muestreos poblacionales de aves, seguimiento de episodios de mortandad de aves por colisión y electrocución o control del estado de la vegetación.