La economía circular representa una evolución necesaria en los sistemas productivos. Desde el Área de Ingeniería Circular desarrollamos proyectos que persiguen una gestión eficiente de recursos, como el agua o la agricultura, diseñando infraestructuras resilientes y sostenibles que permiten un uso racional. Aplicamos, además, una perspectiva circular en la gestión y valorización de residuos, bajo el principio de que los materiales y energía que contienen deben recuperarse para ser empleados de nuevo en los ciclos productivos.
La ingeniería juega un papel decisivo en la economía circular. El diseño de sistemas cada vez más eficientes y sostenibles es el reto. Y la pregunta clave es: ¿residuo o recurso? En nuestro caso, pensamos que esto último.